El comercio exterior español parece estar entrando en un cambio de tendencia, por lo que podría estar dejando atrás la crisis. Los datos de aduanas, así como los tráficos según los distintos modos de transporte reflejan síntomas de recuperación o cuanto menos de estabilización en el comercio exterior español una vez superado el ecuador de 2024.

De acuerdo con los datos recopilados por Funcas, en 2023 las exportaciones en volumen retrocedieron en España un 5,1% y las importaciones un 5,4%, tendencia negativa que prosiguió en el primer trimestre de 2024 con sendos descensos del 8,4% en exportación y del 5,3% en importación.

No obstante, la tendencia podría estar cambiando. Ya en abril, debido al factor de desestacionalización de la Semana Santa, las exportaciones crecieron un 15,8% en valor y un 13,1% en volumen, mientras que las importaciones lo hicieron en valor un 14,6% y en volumen un 11%. Dicho esto, en mayo, sin el citado factor de Semana Santa, el comercio exterior reflejó cierta estabilización en su evolución, con un crecimiento de la exportación en valor del 2,3% en valor y del 0,7% en volumen, mientras que las importaciones experimentaron crecimiento cero en valor y un descenso en volumen del 1,4%.

Según Funcas, estos datos podrían estar por fin apuntando a “una posible recuperación”, tal vez más acelerada en la exportación que en la importación, aunque en general permite despertar ciertas esperanzas, máxime si atendemos a cómo están evolucionando en el ámbito de la logística el comercio exterior según los modos.

El comportamiento del comercio exterior es positivo de acuerdo con las estadísticas de tráfico portuario, de tráfico de carga aérea o de transporte internacional de mercancías por carretera. En este caso, se constata un crecimiento sólido de las exportaciones frente al retroceso de las importaciones.

Fuente: Diario del Puerto