Según estimaciones de Eurocontrol y la Comisión Europea (CE), para el 2025 se prevé que el espacio aéreo europeo llegue al colapso. Una situación que repercutirá en una industria transporte aéreo menos eficiente y competitiva. Esto afectará negativamente a la creación de empleo y crecimiento económico del sector aeronáutico europeo, derivado de un impacto negativo en la capacidad de las aerolíneas para desarrollar sus programas de vuelos y el aumento de sus costes operativos. A su vez, esta tesitura supondrá una reducción de los niveles de seguridad de sus operaciones y un aumento de las emisiones contaminantes.
Y es que, en la actualidad, el espacio aéreo europeo es de los más congestionados del mundo y su sistema de gestión sufre deficiencias como la división en sectores, siguiendo fronteras nacionales o aquellos de uso restringido a los militares.
Estas previsiones propiciaron que, en 1999, la Comisión Europea creara la iniciativa “Cielo Único Europeo” (SES, Single European Sky) con el objetivo de reestructurar el sistema ATM europeo, mejorando las prestaciones de los servicios de navegación aérea y evolucionando, así, hacia un sistema de transporte aéreo más eficaz que será capaz de atender la futura demanda prevista y aumentará el rendimiento global del sistema europeo de gestión de tránsito aéreo.
El Cielo Único Europeo se apoya en un marco normativo, compuesto por dos paquetes legislativos (SES I y SES II) y una serie de medidas de ejecución suplementarias. Los pilares fundamentales del CUE son:
– Establecimiento de un sistema de evaluación de rendimientos (performance scheme) que fija niveles de rendimiento requeridos para todos los actores del sector respecto a áreas clave como la seguridad, el medio ambiente, la capacidad y la rentabilidad.
– Establecimiento de un sistema común de tarificación (charging scheme).
– Establecimiento de un gestor de red europeo (Network Manager) que asume el diseño de rutas a nivel europeo, la gestión de frecuencias y códigos radar, la gestión de flujos de tráfico (ATFM) y la operación de la Célula de Coordinación de Crisis de la Aviación Europea.
– Establecimiento de bloques funcionales de espacio aéreo (FAB) “transfronterizos”, basados en requisitos operacionales, con objeto de lograr una organización más racional del espacio aéreo.
Por otro lado, la iniciativa SES presenta un brazo tecnológico: el programa SESAR (Single European Sky ATM Research). Un proyecto de I+D+i que parte de la comunidad de transporte aéreo europea, cuya misión es la implantación (hacia 2020) de una red de gestión del tráfico aéreo europeo de altas prestaciones. A día de hoy, el Ejecutivo español pide a la Comisión Europea que siga realizando aportaciones tecnológicas al programa SESAR, a través de ASNA y empresas españolas fabricantes de equipos, para continuar promoviendo el desarrollo e implementación del Cielo Único dentro de la Unión Europea.
Fuentes: Europa Press, página web de AENA y Ministerio de Fomento.