La logística sigue retrocediendo a mayor velocidad que el conjunto de la economía, eso se desprende del Informe Estadístico del sector logístico correspondiente al tercer trimestre de 2020 que destaca, además, cómo los distintos ratios económicos y de volúmenes se van estabilizando siempre al ritmo de las “olas” que está marcando la pandemia.

En el tercer trimestre quedó constancia de como algunos sectores y nichos comenzaron a respirar tras el confinamiento y se produjeron ciertos aires de recuperación sin prever lo que iba a ser la segunda ola y la renovada dinámica de restricciones.

Algunos sectores claves para la economía española siguieron fuertemente dañados, pues las medidas ligadas a la nueva normalidad no aminoraron sus particulares restricciones. Aun así, este tercer trimestre moduló de manera importante los distintos retrocesos hasta servir de termómetro para darnos una verdadera dimensión de la sima alcanzada.

Frente a una caída del PIB de más del 21% en el segundo trimestre del año, en el tercer trimestre, una vez levantado el confinamiento, la economía española retrocedió un 8,7%, para dejar las pérdidas en el acumulado del año en el -11,5%.

Este comportamiento también se apreció en el comercio exterior. En lo que respecta a las exportaciones, mientras que en el segundo trimestre del año cayeron en valor un 27,7%, en el tercer trimestre la caída se limitó al 5,7%, cifras aún más contenidas en el volumen, con también un retroceso de más del 27% en el segundo trimestre frente al 4% en el tercero. En el acumulado del año, hasta septiembre las exportaciones cayeron un 12,6% en valor y un 12,3% en volumen.

En cuanto a las importaciones, mientras que en el segundo trimestre retrocedieron un 32,5% en valor y un 28,9% en volumen, en el tercer trimestre el retroceso se redujo a la mitad y fue del 14,1% en valor y 10,7% en volumen, para un acumulado del -17,2% en valor y -15,2% en volumen.

Impacto

La traslación de este volumen de actividad al sector logístico es automática, si bien la disparidad por modos es más que sustantiva. Frente al importante descenso en puertos y ferrocarril, la carretera se ha mantenido y en el aéreo se ha desplomado, lo que evidencia también la variabilidad de los mercados internacionales y de los subsectores económicos.

En el tercer trimestre los puertos situaron su caída en el -10% para estabilizar el retroceso acumulado en el -10,6%. De igual modo, Renfe, en el ámbito ferroviario pasó de un descenso del 31,7% en el segundo trimestre al 16,9% en el tercero.

En los dos extremos se situaron la carretera y la carga aérea. La primera, tras caer un 11,2% en el segundo trimestre, limitó su caída en el tercero al 5,6%. El transporte aéreo de mercancías, en cambio, si bien también redujo su descenso de forma muy importante, pues venía de caer en el segundo trimestre un 49,8%, aun retrocedió en el tercero un 28%.

Las cifras de volumen de negocios no fueron tan matizadas. De acuerdo con el INE, los ingresos del sector logístico en el tercer trimestre cayeron en el entorno del 20% y acumularon un retroceso del -20,6%. Esto ya no supone estar ligeramente por encima del retroceso del PIB como sucedió en el segundo trimestre. Ahora la caída fue de más del doble, no pudiendo obviar aquí el peso en estas cifras de sectores como el aéreo y el pasaje.

En el acumulado hasta septiembre el sector del transporte por carretera experimentó una caída del 8,1%, la más moderada, frente al retroceso del 40,4% del transporte ferroviario o del 58,2% del transporte aéreo. El transporte marítimo descendió un 21,6% y las actividades de almacenamiento y anexas al transporte cayeron hasta septiembre un 14,4%. Las actividades postales y de correo descendieron un 2,7%.

Fuente: Diario del Puerto